La ciencia
Al combinar olores e imágenes, ReScent ofrece una forma sencilla de desarrollar nuevas vías entre la nariz y nuestro cerebro neuroplástico, mejorando la capacidad de identificar olores comunes, pero también aumentando la función cognitiva en general.²
Los estudios demuestran que mediante el entrenamiento regular podemos restablecer la comunicación alterada entre la nariz y el cerebro.
Lo que dicen los demás sobre la ciencia
ReScent para la pérdida de olfato
Analizar el olfato
Anosmi
Sin sentido del olfato
Hyposmi
Deterioro del sentido del olfato
Parosmi
Sentido del olfato distorsionado
La anosmia, la hiposmia y la parosmia pueden ser síntomas de infección (resfriado común, gripe, COVID-19), traumatismo craneoencefálico, trastornos neurológicos o psicológicos como enfermedades degenerativas, depresión o estrés grave y continuado.
Estimula tu cerebro
El entrenamiento olfativo regular ayuda a activar las vías neuronales hacia el centro de la memoria del cerebro -el hipocampo- y estudios recientes han demostrado que el entrenamiento olfativo en personas mayores (+57 años) puede mejorar las capacidades cognitivas, en ciertos casos, ¡incluso más que los sudokus diarios!²
Prevenir la demencia
La demencia está aumentando en todo el mundo, con 130 millones de casos previstos para 2050.
Los estudios revelan que los adultos mayores (57+) que tienen dificultades para identificar olores comunes tienen el doble de probabilidades de desarrollar demencia en un plazo de cinco años. Se ha demostrado que el entrenamiento olfativo regular mejora tanto el olfato como la función cognitiva.
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